Los reinos de Solaris

Jinx2117 Fantasy

Cuando he apagado las luces y estoy por dormirme escucho el girar del pomo de la puerta. Yo me levanto alerta. Así como hay traidores en nuestros reinos, seguramente Ethan tiene sus propios enemigos
—¿Quién es? — mi voz suena grave y firme
—Soy yo— identifico su voz en menos de un segundo y mis hombros vuelven a relajarse —Disculpa molestarte, ¿ibas a dormir ya?
—No, está bien— le digo sentándome en la cama mientras prendo la lampara que está a mi derecha. —¿Qué sucede? ¿venias a preguntarme algo?
El me asiente — debo contarte algo
Yo observo sus ojos azules y dejo que me explique toda la situación. Y lo que su madre quiere. No sé qué pensar sobre esto.
—¿Por qué tu madre piensa…?- entonces detengo mi pregunta recordando lo obvio.
¿Todo esto sale de… porque me defendió en el bosque?
—P-pero eso es lo usual ¿no? Algo que harías por un amigo
Entonces sus ojos azules miran los míos — yo no te veo como una amiga, Nora
El silencio de la noche nos inunda y llena por completo la estancia. No sé qué decirle ahora. Entonces noto como sus ojos miran mis labios. Yo los cierro, dándome cuenta de que antes estaban entreabiertos.
Miro hacia abajo, hacia las sábanas de esta cama, y es cuando noto su cercanía y lo que le ha pedido su madre.
Es una locura pensar que un hada y lobo pudieran…
Yo sacudo mi cabeza
—Disculpa si te he incomodado — me dice — losiento…
¿Por qué está pidiendo disculpas? ¿solo por decir sus sentimientos?
No es que decirlos para mi sea fácil, a decir verdad, las hadas no suelen hacer eso, mostrar emociones.
—Bueno… quizás deba irme…
Yo lo detengo cuando siento que se levanta. Lo he tomado de la mano —no.
El regresa a verme, agacha el rostro para observarme —quédate—le pido —puedes dormir aquí... conmigo
Después de todo, este es su cuarto.
Yo me hago a un lado para darle el espacio suficiente en la cama
—N-no… no se …. no sé si sea buena idea
—Hazlo — le pido — es tu cama después de todo. Además, no es justo que te vayas a otra parte cuando yo soy la intrusa en tu alcoba
—No eres una intrusa Nora— me dice
Yo acepto esa respuesta. — ya hemos dormido juntos antes— le digo —¿porque sería diferente ahora?
Estoy mintiendo por supuesto, claro que él y yo sabemos que es diferente ahora. Estamos compartiendo una misma cama, en su reino, en su cuarto, y estoy usando ropa bastante corta y reveladora ahora mismo.
El con algo de duda accede.
Se cambia, y luego se recuesta a mi lado mientras apaga la luz.
La sensación es un poco extraña, solo hago silencio en medio de la oscuridad y trato de dormir, aunque la verdad es que me es imposible.
No puedo dormir…
¿Cómo podría cuando siento su cuerpo tan cerca del mío…?
Lo comprendo también. Ethan me gusta.
—¿Nora? — su voz es suave, baja, y grave. Es curioso como las voces suenan diferentes cuando no hay luz, como el sonido se filtra en la oscuridad envolviéndolo todo —¿estas despierta?
—Si. — le contesto por lo bajo, casi susurrando las palabras
—Puede que no te haya confesado antes, pero… la verdad... —escucho su respirar — la verdad es que me siento perdido
—¿Qué? —yo volteo hacia el
—No sé qué hacer respecto a mi madre, me gustaría… me gustaría que me ayudaras a idear un plan de escape
—¿Escape?
—Mañana se cumple el tercer dia. Así que debemos estar fuera de Nostabno para cuando llegue. Tu eres muy lista. — me dice y siento como su rostro se gira hacia mi dirección — eres la persona más lista que conozco. Por favor… dime que hacer
Yo lo observo y siento a mi corazón ablandarse.
Miro hacia la cama y siento la suavidad de las sábanas — quizás la solución sea mucho más fácil que esa
—¿Qué? — el aún no lo entiende
—Hablo de darle a tu madre lo que quiere
El silencio nos inunda y el parece pensarlo, y luego parece entenderlo —¿de engañarla?
—No.— le digo — de verdad. Darle lo que quiere de verdad.
Otra vez ese incomodo silencio —no.
Yo me sorprendo de oír su respuesta, la verdad, es que mentiría si dijera que eso no me dolió. Él no quería hacerlo. No conmigo. ¿Por qué lo querría? Él ya tuvo a su pareja, y yo solo soy un hada. Una aberración para su r**a.
—Perdona…— digo volteándome
—Nora…— yo trato de ignorar su voz
—Nora— insiste el cuándo siento el movimiento en la cama. Se ha sentado de rodillas mientras se ha acercado más hacia mí. Su mano tocando mi hombro, luego girándome levemente para obligarme a verle —quizás me has malentendido
—Entiendo bien— le suelto tranquila. Al menos espero que así suena mi voz. Que mi corazón no delate lo afectada que estoy.

Unfold